El lagrimeo en los ojos mientras usas tus lentes puede tener diversas causas. En este post te explicamos todo lo que debes saber sobre esta afección.
¿Por qué me lloran los ojos con las gafas puestas?
Esta es una pregunta que muchas personas que usan lentes suelen hacerse. Tener los ojos llorosos es una afección que suele ocurrir a menudo y que puede tener causas muy diversas.
En muchas ocasiones, el lagrimeo excesivo puede deberse a alergias, patologías oculares como el síndrome del ojo seco, infecciones bacterianas e incluso a traumatismos, pero, ¿qué ocurre cuando tienes los ojos llorosos por culpa de las gafas?
En este post te explicamos todo lo que necesitas saber si tienes este problema y quieres solucionarlo, ¡sigue leyendo!
En la mayoría de los casos, cuando nos lloran los ojos con las gafas puestas suele deberse a un problema en la graduación de las lentes.
Esta es una situación que puede estar causada tanto a un mal diagnóstico inicial como a que con el tiempo hayan aumentado el número de dioptrías y necesites una mayor graduación, por lo que es posible que tus ojos estén tratando de decirte que necesitas una revisión ocular.
Un problema de visión no tratado de la forma adecuada puede causar que nuestros ojos lloren debido al sobreesfuerzo que realizamos al intentar ver correctamente, causando irritación en nuestro globo ocular y provocando lagrimeo.
Sin embargo, este no es el único síntoma que pone de manifiesto una mala graduación de las gafas.
Estos son algunos síntomas que suelen presentar las personas cuyas lentes presentan una graduación incorrecta:
- Visión borrosa. Si el cristal de nuestras lentes no está correctamente graduado para corregir nuestra patología, lo más probable es que nuestro enfoque esté distorsionado, siendo incapaces de ver con claridad y definición.
- Mareos y dolores de cabeza. El sobreesfuerzo que conlleva estar forzando la vista constantemente para ver correctamente también puede causar molestias en nuestro cerebro, que suelen manifestarse en mareos y migrañas o dolores por sobrecarga mental.
- Enrojecimiento e inflamación de la zona. El lagrimeo constante puede desencadenar la irritación de la zona ocular, afectando también a la salud de la piel.
Además, este es un problema que abarca la mayoría de patologías, por lo que tanto los síntomas de las gafas mal graduadas en el astigmatismo, como en la miopía e hipermetropía, entre otros, suelen manifestarse de la misma manera.
Si has comprobado que tus gafas están mal graduadas y te está causando molestias, te recomendamos que acudas a un profesional para que revise y corrija la graduación de tus gafas.
Este es un problema que no deberías dejar pasar, ya que utilizar gafas mal graduadas durante un largo periodo de tiempo puede incrementar las molestias, y, en el caso de los niños, desencadenar graves consecuencias para su salud ocular.
En Cottet ponemos a tu servicio a nuestro equipo de ópticos, que encontrarán una solución para tu problema sea cuál sea. Pide cita ahora en cualquiera de nuestros centros y estaremos encantados de atenderte.
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